Castro, en un comunicado del diez de mayo, admitió que fue el propio presidente Figueres, quien durante la celebración de los 50 años de la ONU, en octubre de 1995, propuso al Primer Ministro Israelí, Yizah Rabin, la"posibilidad de una transacción (de armas) entre el gobiernos.
La compra se haría a la Industria Militar de Israel (TAAS)- estatal-, que aceptó un trueque se munición declarada en desecho por un costo de 702.000 dólares, y suministrar, además, equipo nuevo por 4,5 millones de dólares.
Según dijo, las "armas y municiones consideradas en la transacción son usualmente utilizadas por diversas fuerzas de policía del mundo y respetan la legislación costarricense."
El ex presidente de Costa Rica y Premio Nobel de la Paz Oscar Arias advirtió sobre el riesgo de que el Gobierno lleve al país hacia el "militarismo," denunció "anomalías autoritarias."
En una conferencia de prensa realizada en el Centro para la Paz de la Fundación Arias, el ex presidente criticó el "secreto de Estado" impuesto por el presidente Figueres, a la compra de armas, y calificó la prohibición de informar como "un error y una extralimitación del Gobierno."
El secreto de Estado y una serie de hechos registrados en los últimos meses son "anomalías autoritarias," advirtió Arias, quien expresó su preocupación de que tales actitudes sean "síntomas de una política sistematica de fortalecimiento de los cuerpos represivos para alejarlos de su carácter civil y sustraerlos del control popular."
La expulsión hace dos años de presuntos asaltantes venezolanos que estaban en manos de los tribunales de justicia, un desfile policial "intimidatorio" hasta el Congreso a fin de presionar para que los diputados aprobaran una reforma penal, la creación de una Guardia Presidencial de "esructura castrense" y las extralimitaciones de la policía en manifestaciones públicas, fueron otras anomalías denunciadas por Arias.
"Si el país necesita nuevas armas, debe hacerse a Luz del día, pues la transparencia es muy importante," agregó el expresidente, quien propuso la creación por parte del Congreso de una "Comisión Permanente de Asuntos de Seguridad" para que las políticas en esta áerea "estan sujetos a recio control" del Parlamento.
Mientras círculos políticos y la prensa alabaron las críticas de Arias, el Gobierno rechazó "los conceptos y calificativos erróneos" emitidos por Arias, señalo un comunicado distribuido el 3 de junio por la Casa Presidencial, que no precisó las imprecisiones del Nobel de las Paz.
El Gobierno, por otra parte, acogió dos propuestas de Arias, tendientes a crear una Comisión Permanente de Asuntos de Seguridad, y la elaboración de una ley que regule todo lo concerniente a la declaratoria de "secreto de Estado," al calificarlas de "útiles para el interés nacional y conviene impulsarlas."
El Gobierno afirmó que está empeñado en formar una policía profesional y civilista, añadió que "continúa buscando el equipamiento apropiado" para ese cuerpo institucional.
Costa Rica abolió el ejército en 1948, durante el gobierno de José Figueres Ferrer, padre del actual presidente, y actualmente con 7.500 policías que resguardan el territorio y la soberanía costarricense.
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Diálogo Centroamericano
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