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El Salvador:Elecciones y democraciaPor Eduardo Linares * El pasado 16 de marzo, se celebró la segunda elección, cinco años después de la firma de los Acuerdos de Paz, y en consecuencia, la segunda participación del FMLN. Las condiciones bajo los cuales se desarrolló dicho evento fueron en un escenario de mucha desigualdad, pues el partido en el poder, (ARENA), nunca aprobó las reformas electorales, contempladas en los Acuerdos, que garantizarían un proceso electoral más transparente como son: documento único, voto domiciliario, limpieza del padrón electoral, y la integración de los conceptos municipales por los diferentes partidos. Además, durante la campaña electoral ARENA utilizó para sus propósitos la mayoría en el Congreso apoyado por otros partidos satélites. Las reformas del Código Electoral ya existente y la utilización de los recursos del Gobierno a favor de su campaña, que se caracterizó por su acostumbrada agresividad, basada en el pasado. Por el contrario, el FMLN, aún con todas esas desventajas, desarrolló una campaña muy propositiva y con planteamientos programáticos, basada en la realidad: la grave crisis económica producto del modelo económico del partido de Gobierno, el cual está afectando a la mayoría de la población, acompañada de graves hechos de corrupción en la mayoría de los sectores de gobierno. Durante la campaña las encuestas daban como favorito al FMLN en los mayores núcleos urbanos, lo cual obligó a ARENA a redoblar su campaña sucia, sin ofrecer un planteamiento serio. Incluso a última hora, aprovechando su mayoría parlamentaria hicieron reformas al Código Electoral en favor de ARENA y pretendieron posponer la fecha de los comicios. El FMLN salió ganador del proceso electoral en las principales cabeceras departamentales, incluyendo la capital, y ciertas poblaciones que tradicionalmente votaban por ARENA como Santa Ana, Chalchuapa, etc.
Los resultados dieron 56 alcaldías para el FMLN y 160 para ARENA (la mayoría pequeños municipios) y los restantes 46 municipios se distribuyeron en el resto de partidos pequeños. El FMLN ganó 27 escaños en el Congreso, uno menos que ARENA, que ganó 28, mientras, otros 29 quedaron en manos de otros partidos. En las elecciones anteriores, el FMLN había logrado elegir 21 diputados y 14 alcaldías, por lo que los resultados de marzo constituyen una victoria cualitativa y cuantitativa, ya que en el ámbito municipal gobernaremos al 45 por ciento de la población salvadoreña y con mayores posibilidades de concertar e incidir en la Asamblea Legislativa. Esta victoria hace del FMLN una fuerza más moralizadora, más consistente y con gran perspectiva de cara al futuro, en el sentido de ganar más población, y con ello, mayores espacios de incidencia y contribuir de esta manera a que avance la incipiente, pero significativa, democracia que estamos construyendo los salvadoreños y aspirar a un verdadero Estado de Derecho. Una opinión sobre los comicios también se solicitó a un diputado de ARENA, pero su contribución no llegó durante el tiempo acordado para su envió y pese a las numerosas llamadas telefónicas. Diálogo Centroamericano es producido por el Centro para la Paz y la Reconciliación de la Fundación Arias para la Paz y e1 Progreso Humano con el apoyo de la Fundación Ford. Apartado 8-6410-1000, San José,
Costa Rica. |