Declaration
of Marc Grossman, undersecretary of State for Political Affairs, Bogota,
February 5, 2002
"Les
agradezco a todos que hayan venido hoy. Mi nombre es Marc Grossman y soy
el Subsecretario de Estado para Asuntos Políticos.
Primero, quiero expresar
mi gratitud a nuestros anfitriones colombianos por la hospitalidad que
han ofrecido a nuestra delegación, la cual incluye muchos departamentos
de nuestro Gobierno y un representante de la Casa Blanca, el Embajador
John Maisto. En especial, quiero presentarles a nuestro nuevo Subsecretario
para Asuntos del Hemisferio Occidental, Otto Reich. También deseo
agradecerle a la Embajadora Patterson por el apoyo que nos han dado durante
esta visita.
Cuando visité
Colombia en agosto, dije que Colombia es importante para Estados Unidos.
El mundo ha cambiado después de los eventos del 11 de septiembre.
No obstante, esa frase sigue siendo verdad. Estamos comprometidos con
el apoyo a los colombianos para crear una democracia en paz, próspera,
libre de los narcóticos y del terrorismo.
Durante esta visita,
nuestra delegacion ha tenido el honor de reunirse con el Presidente Pastrana
y los miembros de su gabinete, incluyendo al Vicepresidente Bell y al
Canciller Fernández de Soto. Abordamos el tema de más importancia
actualmente para los colombianos: el proceso de paz y cómo poner
fin al terrorismo que azota a Colombia.
Apoyamos al Presidente
Pastrana en los esfuerzos de su gobierno por lograr la paz. También
reconocemos los esfuerzos de la comunidad internacional para ayudar a
lograr esa paz. Creemos que el gobierno de Colombia realmente quiere lograr
la paz. La última campaña de terror de las Farc contra la
población civil y la infraestructura, demuestra que hasta ahora
ellos no quieren lograr la paz.
En reuniones diferentes
durante esta visita, yo le expresé ese punto de vista al Enviado
Especial de las Naciones Unidas, James Lemoyne, y a los líderes
de la sociedad civil colombiana.
También repasé
con el Presidente Pastrana y su equipo, los elementos centrales de nuestra
colaboración bilateral.
Conversamos sobre
todos nuestros esfuerzos antinarcóticos: lo que ha funcionado hasta
ahora y las áreas que necesitan mejorarse. Voy a hacerles un pequeño
recuento de cómo evalúa Estados Unidos el éxito del
Plan Colombia después de cumplir su primer año.
Desde que comenzó
la erradicación aérea en diciembre de 2000, se han fumigado
unas 84.000 hectáreas de cultivos de coca, lo cual quiere decir
que el año pasado se produjeron unos 580.000 kilos menos de cocaína.
Tabajando en conjunto,
la Fuerza de Tarea Conjunta del Sur y la Brigada Antinarcóticos
del Ejército de Colombia destruyeron 20 laboratorios de clorhidrato
de cocaína y 700 laboratorios de base de coca. Estos esfuerzos
complementan el notable trabajo que está llevando a cabo la Policía
Antinarcóticos.
Con el apoyo de la
USAID se han establecido 18 Casas de Justicia, las cuales son centros
para resolución de conflictos sin aumentar la carga al sistema
judicial colombiano. Estados Unidos también está proporcionando
capacitación a los jueces y funcionarios judiciales paa ayudar
a modernizar el sistema judicial de Colombia.
Después de
repasar este progreso, tratamos algunas formas en las cuales nuestro apoyo
a Colombia puede ser más efectivo en el futuro. Hablamos sobre
varias iniciativas específicas que están comenzando actualmente,
entre ellas: el entrenamiento para una segunda brigada móvil antinarcóticos;
mayor asistencia para las fuerzas de seguridad contra el secuestro; y
la propuesta de prestar asistencia a las fuerzas de seguridad para la
protección del oleoducto.
Desde mi última
visita, el Congreso de EE.UU. aprobó la Iniciativa Regional Andina
del Presidente Bush, la cual proporcionará otros U$782 millones
en ayuda para Colombia y sus vecinos. Este dinero complementa nuestra
contribución anterior de U$1,3 millardos al Plan Colombia, y se
utilizará en la lucha contra los narcotraficantes y terroristas,
así como para ayudar a reforzar las instituciones democráticas
y promover el desarrollo económico.
Además, el
Presidente Bush envió ayer al Congreso su propuesta de presupuesto
para el año fiscal 2003, el cual incluye U$439 millones para apoyar
programas antinarcóticos en curso, así como programas de
desarrollo social en Colombia. También incluye U$98 millones adicionales
para empezar a entrenar y equipar las unidades colombianas para protección
del oleoducto Caño Limón.
La importancia de
proteger los Derechos Humanos, y especialmente de actuar contra los paramilitares,
fue un tema clave en las reuniones con el Fiscal General Luis Camilo Osorio,
con el General Fernando Tapias, y claro está, con el Presidente
Pastrana y el Vicepresidente Bell. Todos expresaron su compromiso con
el mejoramiento de la situación de los Derechos Humanos en Colombia.
También desde
mi última visita, Estados Unidos señaló a las Autodefensas
Unidas de Colombia (AUC) como organización terrorista internacional.
Hemos revocado las visas de los patrocinadores de las AUC y estamos incluuyendo
los nombres de otros miembros conocidos de la organización en nuestro
sistema automatizado, para que nunca puedan obtener visas.
También me
complace haber tenido la oportunidad de reunirme con miembros del gobierno
colombiano y con los líderes empresariales, para tratar nuestro
compromiso con la expansión del comercio internacional como motor
del crecimiento económico regional y, en particular, la necesidad
de prorrogar y ampliar el ATPA. Escuché sus inquietudes y trasmitiré
su claro mensaje en Washington.
Ahora que el Congreso
de EE.UU. ha reanudado sesiones, el Presidente Bush le ha pedido que actúe
rápidamente para prorrogar y ampliar el ATPA.
El apoyo de Estados
Unidos a Colombia es un compromiso a largo plazo. Somos realistas sobre
los enormes desafíos que enfrentamos, pero confiamos en que trabajando
con los colombianos podemos fortalecer las instituciones democráticas
de Colombia y vencer al narcotráfico que financia el terrorismo".
As of February 6, 2002,
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febrero/05/2002020515.htm